d25bc1efd5

En Galende Buzón Abogados contamos con un equipo especializado en asesoramiento laboral. Entendemos que una correcta planificación de los recursos humanos es muy importante para tu negocio, ya que se trata de ayudar a que tu empresa se sitúe mejor en el mercado. Hoy queremos aprovechar este espacio para hablarte de una figura creada por el Departamento de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial, a través del Instituto Aragonés de Fomento, el mediador de emprendimiento.

La figura del mediador de emprendimiento se legisla en Aragón

Como su propio nombre indica, la función de la figura del mediador de emprendimiento es la de mediar en la actividad de las personas emprendedoras. Para ello se ha creado la ley 7/2019, de 29 de marzo, de apoyo y fomento del emprendimiento y del trabajo autónomo en Aragón. Concretamente, en su artículo 29.2 establece que: “El mediador de emprendimiento actuará como facilitador, ofreciendo soluciones prácticas, efectivas y rentables, en distintos ámbitos en los que pueda resultar oportuna la mediación para el emprendedor, como puede ser la mediación financiera, mediación para conseguir inversores, mediación en el proceso de transferencia de propiedad o de negocios, o incluso mediación en conflictos mercantiles que no tengan naturaleza concursal.

La mediación de emprendimiento implica la intervención de un profesional neutral que facilita las relaciones entre los promotores del proyecto o las relaciones de comunicación y negociación con otros agentes externos en procesos de inversión, de financiación, de adquisición o venta, de fusión o de finalización de la actividad.”

Se trata, pues, de una figura muy importante y así lo entiende el gobierno de Aragón que, posteriormente a la Ley, aprobó el Decreto 71/2021, de 2 de junio por el que se crea el Reglamento Regulador del Mediador de Emprendimiento y el Registro Público de Mediadores de Emprendimiento.

El mediador sería entonces un profesional imparcial, con la capacidad para facilitar las relaciones entre los promotores de un determinado proyecto, las relaciones de comunicación, las negociaciones con agentes externos, etc.

Un profesional imparcial que trata de ayudar a que el proyecto se mantenga en el tiempo

Por supuesto, el proceso de mediación no es obligatorio, pero sí muy aconsejable para hacer frente a los diferentes conflictos. Puede darse entre empresas distintas, pero también dentro de una misma empresa, entre diferentes socios o personas que pertenecen a la organización. El factor humano es muy importante en el devenir de una empresa; sin embargo, por las relaciones del día a día, es muy habitual que surjan conflictos en las diferentes áreas.

Es fácil entender que el mediador no tiene ningún tipo de autoridad o poder para solucionar los conflictos. Su función es la de garantizar el diálogo constructivo, de manera que ayude a que las partes, a través de la comunicación, puedan llegar a acuerdos beneficiosos.

Es una solución más rápida y económica que emprender un proceso judicial o de arbitraje, y también implica menos desgaste psicológico y personal.

La figura del mediador de emprendimiento acompaña a las personas que quieren emprender. Su principal función es la de prevenir los conflictos antes incluso de que surjan. En este sentido, su apoyo será fundamental a la hora de desarrollar los aspectos estratégicos de la empresa.

El mediador siempre tratará de velar por la supervivencia del proyecto. Y es que es una figura que surge ante la elevada tasa de cierre de empresas en sus primeros tres años de vida. Según el Informe de Seguimiento anual 2020 del Marco Estratégico en Política de Pyme 2030 elaborado por el Dirección General de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa, en España, casi el 41% de los autónomos y emprendedores cierra sus negocios durante los tres primeros años de actividad económica.

En Galende Buzón Abogados ponemos a disposición de tu empresa o proyecto a nuestro equipo especializado en asesoramiento laboral. .

Entradas recomendadas